Un soneto de Alberti

A LA DIVINA PROPORCIÓN.

A tí, maravillosa disciplina,
media, extrema razón de la hermosura,
que claramente acata la clausura
viva en la malla de tu ley divina.

A tí cárcel feliz de la retina,
aúrea sección, celeste cuadratura,
misteriosa fontana de mesura
que el Universo armónico origina.

A tí, mar de los sueños angulares,
flor de las cinco formas regulares,
dodecaedro azul, arco sonoro.

Luces por alas un compás ardiente.
Tu canto es una esfera transparente.
A tí, divina proporción de oro.

Rafael Alberti

No cabe duda de que Alberti sabe de lo que habla: hay que saber muchas matemáticas para escribir estas líneas.
¿Sabes tú de qué nos habla el poeta?
Destriparé el poema en otro post dentro de unos días, mientras tanto, lee y relee, visitante amigo, y disfruta de la poesía.